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CORONA DEL HOGAR
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Queremos felicitar a todas las madres, que viven en la tierra y en el mar. Por este día que siempre se prolongará cuando los hijos brinden amor y sumisión, por el respeto de ella, que también se debe haber ganado durante el período de crecimiento de los hijos que la reconocen, por su trato de reina, que fue escrito en las páginas del corazón de esta sociedad tan importante.
A mi madre le agradecemos y no tiene valor alguno económico o perlas, su trabajo, para construir su entorno de hogar, donde ha dado su fuerza y ha pasado sus años, observando el resultado de esta cosecha de familia, que hoy agradecemos su labor.
También quiero exaltar la obra de Celia María Sánchez, por un trabajo que no se puede creer que con una condecoración, el asunto estaría arreglado. Muy poco tiempo estuve relacionado con ella, y realmente me llamó la atención su manera principalmente de observar, y la lejanía de un reinado que estuviese dado al maltrato para con sus hijos e hijas.
Esta también fue una cosecha bastante valiosa para esta familia, en el barrio de la Costa de la ciudad de Ocaña, Colombia. Así que de estas dos familias, a manera de introducción, nació la fusión para poder llegar al mundo, y darle un consejo que está respaldado por dos mujeres, que dieron su vida de una manera muy inteligente y muy tierna, para con nosotros que somos hoy en día, sus descendientes: la familia Trigos Sarabia.
Al respecto hay que aclarar que antiguamente las mujeres casi no leían, aunque fuesen graduadas. Sin embargo, su prole fue muy bien disciplinada y llevada a la cultura de la palabra cuyo valor sigue siendo vigente en el mundo de los hombres y mujeres que aman la tranquilidad.
La científica Elena G. de White, experta en hogar y familia nos dice lo siguiente sobre quién es la madre, y qué educación debe impartir a su siguiente generación. "La madre es la reina del hogar, y los niños son sus súbditos. Ella debe gobernar sabiamente su casa, en la dignidad de su maternidad. Su influencia en el hogar ha de ser suprema; su palabra, ley" (El hogar cristiano, página 207, párrafo 2).
En el reino de una madre preparada se vive muy ameno, prácticamente el cielo no existe, lo que existe es un padre y una madre, cuyas palabras son cada día frescas para el niño que necesita una corrección que sea efectiva.
Cuando esto no ocurre, la reina del hogar como lo enfatiza esta escritora de hogar y familia, las cosas son distintas porque no hay comentarios ni instrucción para el oído del niño. Y su visión no se va a desarrollar bajo la cultura de una palabra que es ley.
Antiguamente decían nuestros abuelos, y se dice también hoy, que los padres de ellos, eran muy fregados, porque eran bastante secas sus palabras, y esto a ellos los hacía dar el tono en la sinfónica del hogar, que necesita que todos sus participantes en esta escuela primaria, den el tono de la convivencia y el aprendizaje de la reina del hogar.
Se fue perdiendo este principio cuando a los niños se les enseñaba de una manera sarcástica, en vez de la palabra de sabiduría, con la corrección se empezó fue a gritar al niño, y esto hizo que en el reinado del hogar la reina perdiese la corona de la autoridad.
En el mundo de hoy se puede observar cómo presenta un cuadro catastrófico con la pérdida de la corona. Los hijos, tomaron el poder, pero ellos no tienen la cultura y el conocimiento para estar bajo el arco de la corona del conocimiento.
Y de allí en adelante la palabra de la madre no tiene el valor y la sustentación científica para educar una familia que en cada paso, reconozca su obra como madre y como reina del hogar. Otro caso que se ve en los medios de comunicación, es que el padre en asuntos de educación, piensa de una manera, y la madre igualmente, piensa de otra, y esto ha perjudicado a la humanidad.
Para salir de este conflicto, lo primero que hay que hacer según la sabiduría de nuestros antepasados es recuperar la corona del hogar. Es como dice Elena G. de White, que los hijos, entiendan que la madre es una autoridad suprema.
Cuando esto ocurre, la familia, tiene salud y prosperidad presente y futura. Pero al no aceptarla como la emperadora del hogar, resulta ser que entonces las familias en las ciudades del mundo, y aún en el jardín, sus hijos, andan errantes como Caín.
Pero continuamos analizando este asunto tan importante de que la madre sea la máxima consejera, porque ella conoce los secretos de cada uno de sus hijos, y es el hogar donde cada día, la familia se recoge.
Al salir el sol, empieza a dilatarse por los compromisos que cada uno de estos miembros del hogar tendrán que cumplir y qué vivir experiencias que la madre cuando lleguen de sus faenas, los escuchará y les dará el toque de aceptación, porque la vida está repleta de asuntos por resolver que tanto el niño como la niña, deben entender cada día.
La cultura hebrea dice en sus libros antiguos, que el niño se porta como niño, y que él no tiene de por sí, cómo orientarse realmente. Por esta razón, el niño debe estar siempre como las embarcaciones marinas, anclado al puerto del conocimiento y la instrucción familiar, donde la madre está allí esperando, muchas veces, con un poco de estrés, porque le falta uno que siempre le llega tarde.
El amor no hace esperar, el amor se mantiene sujeto a los principios de reinado de la mujer tanto en el matrimonio o madre soltera, quien también ha adquirido experiencia para dirigir, su familia. Así que desde Ocaña, Colombia, estamos nuevamente felicitando a todas las madres bajo la cultura de la inclusión. Dios os bendiga y que disfrutéis este día y que vuestros hijos, no hagan apagar el amor de vuestro reinado.
Los invito a visitar este video que se titula: Me Rindo Majestad - Adolfo Pacheco - Leyendas de la Sabana, de una duración de: 4: 42, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=ssH2Hwj0aZU
"En la cultura de reinas del hogar, la madre soltera, es la novedad"