CUIDADO EN LA RESERVA

 

</head>

Hay muchas clases de sortijos y acertijos.  Hay que discernir que el acertijo, tiene que ver con la suerte, y para mi, encontrarme un sortijo como lo llamamos en nuestra lengua regional, muy cerca de la reserva de la Torcoroma, realmente es una suerte, que se puede contemplar y apreciar, la diferencia entre las dos palabras o definiciones.

Así que este sortijo es la realidad fresca del día, cuando él madruga a su caminata en plena vía pública hacia la Samaritana.  Es necesario valorar como estos invertebrados viven en un mundo de laboriosidad, donde el ejercicio para mantenerse en pie exige, la acción.

Esta reserva es un centro turístico, donde el ambiente es propicio tanto para la naturaleza, como para los visitantes y propios que madrugan a recibir el frío de la mañana mezclado con los aromas que ofrece el frío al amanecer.

Algunas personas no ven la gran necesidad de esta comunión con los vivientes del bosque con su rocío matutino que casi generalmente, se puede sentir en todo el cuerpo, así como el soritjo sale a recibirlo más escuetamente sobre la carretera.

A la salud hay que invertirle un tiempo que es adicional a lo que comúnmente es una consulta médica, para ver cómo operan nuestros sistemas del cuerpo físico y psicológico.  Así que el sortijo lo hace con una frecuencia que nos invita a mejorar nuestra manera de vivir, que en muchos casos, las personas no tienen tiempo para salir a recibir en esta montaña, la gran bendición de encontrarse con la naturaleza y con el rocío que es la bendición que ofrece gratuitamente, la reserva.

El tener cuidado con los transeúntes de la reserva también es de gran valor.  En algunos casos que he estado por allí, se hallan muchos sortijos heridos de muerte, porque los visitantes no tienen en cuenta estos mensajeros de tranquilidad y sabiduría que están dando cada día, la bienvenida a propios y visitantes.

Respetar la vida y darle el valor que ella merece, incluye tener en cuenta este mundo de los sortijos e insectos, que muchas veces, son desaparecidos, porque el visitante ignora que la naturaleza tiene sus maestros desde lo más pequeño, hasta lo más grande, y para entenderla o comunicarnos con ella, hay que hacerlo bajo la cultura incluyente.

Deje que ella le hable, y aprenda a escucharla, que su voz es tan poderosa como el mar que se ve al acercarnos muy desértico, pero dentro hay una música y unos vivientes que quieren que entendamos, su mundo.

Igualmente la reserva de aves La Torcoroma, espera que quienes contribuyen con su presencia, escuchen y disciernan los diversos lenguajes que tiene el corazón de esta montaña tan importante, para enseñarnos el mundo multi linguístico del mil pies.

Los invito a visitar este video que se titula: TRANQUILIDAD - C C J G, de una duración de: 1: 33, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=PQFKt-v22Dc

"Frescura, paz y tranquilidad, disfruta el sortijo, en su propio mundo"