domingo, 14 de octubre de 2018

EL CABALLERO DE HOY


</head>

El título que se le daba a una persona, de noble o caballero, me ha puesto a pensar lo interesante que es esta distinción.  Y observo que ser caballero, es ser amigo de la realeza.  Y también de la cultura sociable.  Es tal vez, permanecer en un estado de ánimo y actitud positiva, ante la sociedad que va y viene estresada, porque aún no entiende, la caballerosidad, que se debe mantener, en cualquier lugar y circunstancia de la vida.

Al transcurrir los años, tal vez el cine o mis padres y mis amigos, me enseñaron a ser caballero.  Cuando compartimos el diario vivir, el caballero del día a día, va desarrollándose en la práctica y culturas del jardín.

Cuando hablamos de caballero, también hablamos de una palabra que podríamos decir que es un sinónimo, que originalmente indica la clase noble.  La nobleza, ha perdido la imagen, y ya no se habla de tal palabra, de tal caballero, que posee estos atributos, muy naturales y que siempre el género humano, ha anhelado llegar a la altura de un caballero.

Esto es sencillo, se ha dicho que las cosas sencillas, son las que nos hacen grandes.  Este es un buen concepto de la palabra: caballero.  El caballero, siempre está sonriente, en algunos casos, este tipo de personas, son muy folclóricas, y esto le facilita, el poder mantenerse en la cultura de caballero pensante.

Cierto día, como todos los seres humanos, estuve donde un gran médico, muy prestigioso en la ciudad de los Caro, y apartamos con su secretaria, una cita.  Cuando llegamos noté en su rostro y en su sonrisa, éste elemento que es tan importante para la sociedad, que es la nobleza. 

La palabra nobleza, no significa sometimiento, ni tampoco, entrega sin sentido.  Ese doctor me dio los buenos días, y me dijo: ¿usted es Alfonso Trigos?.  Y le contesté: si, soy el caballero del jardín, doctor.  

Me dice luego, que nos sentemos.  A la verdad es que este doctor, realmente es un caballero, porque éste es el trato que se le debe acreditar al ser humano, que nos rodea.  Me preguntó por mis estudios, y yo le dije, analizando que a éste hombre, se le puede hablar porque tiene oído y una sonrisa que indican, confianza, le dije que lo había hecho a través de los diferentes estamentos que tiene la tierra.

Él me dice: como la televisión, por ejemplo.  Yo le dije: si señor.  Quisiera escucharle un momento, me dice él.  Yo le comenté en pocas palabras, lo que había hecho en el campo, y lo que luego procedí a hacer en la ciudad, para conocer la cultura y el conocimiento de los ciudadanos.

Cuando un hombre de cultura, lleva a su hijo, ya sea bien de la ciudad al campo, o del campo, a la ciudad, por ejemplo, si el niño que va con él, le da como miedo saludar a las personas, el padre sabio le repite al niño, hijo: sea caballero.

Para llegar al conocimiento de la sociología, se llega por cualquier canal, incluso saludando a las bestias del campo, las plantas y los árboles, entre otras.  Las ciudades son un poco más difíciles, porque no nos conocen, pero igualmente el que empieza a distinguirnos y ve en nosotros, la cultura de la nobleza, nos escucha.

Nos pide que dialoguemos de nuestras vivencias o experiencias.  Esto fue lo que me inspiró realmente para poder proyectar este blog, que será eficiente, cuando los que buscan la cultura del caballero, la hallen en estas letras, que van escritas basadas en experiencias reales, tangibles, como el amor.

Los invito a visitar este video que se titula: UNA INGENIERÍA SORPRENDENTE,  de una duración de: 2: 38, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=stTJgOFjuK4&index=65&list=PLzD4cflvP5uMrq7nNBi89hbz5kU_7-n0t

"Ciencia y conocimiento, se hallan en la sociología del caballero de moda"

No hay comentarios:

Publicar un comentario