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En el mundo de las aves, la ornitología, nos lleva a conocer más, revelándose su mundo. Camino a la pradera, en la primera hora del día, hallamos esta ave que se alimenta con una dieta muy equilibrada. Ella lo hace con insectos y semillas que encuentra en este amanecer para fortalecer su sangre.
Y así poder vivir una vida interesante y con sentido para su especie, que siempre ha permanecido en este territorio del santuario de la Torcoroma. Sin embargo, estas tomas se han hecho es camino a la pradera.
En este territorio del trópico, sus montañas que bajan y suben con sus variados cantos, las aves, saben cómo alimentarse y cómo subsistir a través de millones de años, donde ellas mantienen los principios heredados de sus padres, en lo que concierne a la alimentación y a la salud.
El ser humano al descuidar los principios de salud también está desconectándose de la sabiduría y la ciencia de sus antepasados. El hombre de hoy, debe regresar a una cultura y a una ciencia que le permita conocerse a sí mismo, y la ornitología, está siempre tocando la puerta del entendimiento porque la ornitología, es una de las ciencias más sorprendentes, por sus variados principios, que podemos contemplar en este nuevo mundo.
Este día madrugué con mi esposa, y las aves, para poder observar que después del ritual de su canto, aparecen al borde del camino. Disfrutamos su canto y luego su presencia en este lugar nos permitieron contemplarlas y saborear las imágenes que sólo podemos captar en fotos.
El conocimiento científico es el camino para salir de esa encrucijada en la que el ser humano, se ha sumergido ignorando el medio ambiente y destruyendo su riqueza. Sin embargo, las aves, buscan el alimento para poder vivir una vida sana.
Y su medio, les provee el alimento, la felicidad y el deseo de cantar, luego de tomar la energía que el alimento les provee. Lo que se necesita es un espíritu que eleve al hombre a las alturas como las alas a las aves, para buscar su alimento, así sea a larga distancia.
Y creer que lo hay, como lo hacen estas aves en esta reserva. Y no como el ser humano que se ha desviado hacia otros objetivos que no son el de la vida, el de trabajar, disfrutar y permanecer en la cultura universal e instrucción de sus padres, que es lo que en estas aves podemos apreciar, por sus comportamientos y su longevidad.
En el mundo de las aves, nadie está ocioso, y nadie se come el pan en balde. Todas ellas deben cumplir con el requisito estándar que ha colocado la vida. El que no trabaje, que no coma. Esto es algo que las familias de hoy, deben adoptar.
Cada uno de ellos debe enfatizar a sus hijos, esta filosofía, que permanece y la contemplamos en esta mañana, cuando la aurora despierta y las aves sienten la influencia de su llamado, para su primera obra, que es el canto.
Los mismos principios con mejoras pueden practicar las culturas científicas que el globo hoy tiene, y que buscan las soluciones al problema de trabajo, de empleo, de capacidad mental, física y psicológica. Y conectar al género humano con la gran potencia de las ciencias en el globo, que es la naturaleza.
Esta se encargará a través de la familia, el jardín y la academia, de llevar a la familia humana, a sentir y a vivir en un mundo de felicidad y de responsabilidad. De lo contrario va a permanecer el mismo conflicto entre padres e hijos, y entre docentes y estudiantes.
Los invito a visitar este video que se titula: ORNITOLOGÍA OTARÉ - C C J G, de una duración de: 2: 08, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=ePqnZ5lDpGY&list=PLzD4cflvP5uMrq7nNBi89hbz5kU_7-n0t&index=186
"En la ciencia de la ornitología, he visto bajo el sol, instrucción y cultura saludable"
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