miércoles, 23 de marzo de 2016

UN MONSTRUO MAGNÍFICO

La naturaleza sigue siendo el epicentro de la ciencia, el conocimiento y la sabiduría.  Esta vez vamos a analizar un poco, acerca de la vida del gusano, en su proceso de convertirse en mariposa.

La mayoría del género humano, le tiene cierta aversión, al gusano, algunos dicen que es un monstruo, que es una cosa muy fea, y en fin, hablan mal de él.

Pero la biología interpretativa, le da la importancia al monstruo que muchos aborrecen, por las malas influencias.  La mariposa deja el cascarón, o sea el gusano, para continuar en su hermoso y paradisíaco mundo.

Pero el ser humano no puede darse el lujo de la mariposa, de dejar atrás el monstruo, porque lo necesita para poder andar entre los seres humanos.  Ya que toda la inspiración del hombre, viene del monstruo, que cada día revela más cosas, al mundo.

Digamos que el monstruo es el alma que compone a un ser viviente, y así a todos los seres del planeta.  Para que se transforme el monstruo humano, o gusano, hay que ponerle una disciplina que le permita ser equilibrado en sus estudios, y sus virtudes puedan transmitir un conocimiento biológico, que sirva para todas las tribus del mundo.

Debemos reconocer que este monstruo no debe morir prematuramente, si es posible, debemos alimentarlo físicamente e intelectualmente, para que la mariposa de la gracia y la ciencia, puedan participar de una evolución física, mental y moral.

Estudiando la biología, podemos encontrar grandes tesoros, e incluso encontrarnos nosotros mismos, ya que la religión nos hace creer que somos mariposas en la creación de Dios.  Cuando en realidad se echa a un lado, el origen de la belleza.

Dios ha creado una infinita variedad de gusanos y de insectos, que nos muestran lo interesante que sigue siendo el mundo de las ciencias, que nace de la evolución de un gusano.

Conocer al gusano, es conocernos a nosotros mismos, y es encontrar esa ciencia, que nos muestra la gloria del monstruo humano.

"Buscad en la naturaleza el conocimiento, y con sabiduría, dice Jehová, hallarás la ciencia"

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