El mundo de los insectos, es una academia que continuamente, nos está enseñando, su arquitectura, de una manera muy sencilla e inteligente. Esta vez estoy escribiendo de unas pequeñas hormigas negras, que llegan al patio de mi casa.
Las hormigas, han llegado con el propósito de hacer su construcción. La verdad es que hoy, las observé y me llamó la atención, su obra. Después de tres días, ya se muestra la obra como la de un estadio de fútbol, bastante llamativo, con su grama verde, en el centro.
Digamos que estas maestras de la ingeniería, están logrando su propósito, al abrigo del hombre, por su constancia. En segundo lugar por su unidad.
Estas hormigas, no pueden vivir en conflicto, porque esto impactaría en su unidad y haría que toda la estructura que han construido se derrumbe, y su clan, desaparezca. Podemos contemplar en primer lugar que la ingeniería de esta pequeña hormiga, se realiza desde el punto de vista de la unidad.
Y que en ningún momento, una de estas hormigas, puede tener otro objetivo diferente al del resto de las hormigas, y vivir allí con ellas. Ni tampoco puede dividirse este ejército, y lograr sus propósitos de construcción.
El éxito de la construcción y del clan, dependen en sí de la unidad. Esto pondría a pensar a muchos seres humanos que les gusta la reflexión, que les gusta alimentar el cerebro con cosas sencillas que tienen un impacto en la sabiduría del hombre, que emprende así como la hormiga, a crear su propio pensamiento o proyecto de ingeniería.
La información tiene un propósito y es el de llegar a los medios y luego a cada mente, que busca construir su ciudadela pensante, que está auto construyendo el hombre de hoy, y que nos enseña tantas lecciones y en tantos ramos de la ciencia, que en este caso me he centrado, en la construcción del pensamiento y la ingeniería de su sabiduría.
La hormiga por todos los medios, trata de tener un mejor futuro, y digamos que la ingeniería es una de su naturales virtudes. En el hombre, es más bien esto polifacético, porque unos estudian una ciencia, otros estudian otra, y así sucesivamente, nosotros los hombres las estudiamos todas, para aplicarlas al mundo del beneficio propio y común de la humanidad, y creando tecnologías, que nos permiten hoy en día, estar tan unidos a través de las comunicaciones, como la misma hormiga, en el patio de mi casa.
Pero todos los seres humanos, nacemos con el mismo principio de la hormiga, de aprender, y entonces podríamos decir que el hombre, tiene que construir la base o el núcleo del pensamiento.
La Psicología nos lleva a darnos cuenta que tanto la hormiga como el hombre, nace para construir nuestro mundo. Pero si la hormiga se rebela a ese principio, que la ha hecho mundialmente famosa, nunca podría ser semejante constructora o diseñadora en cada paso que da al mundo futurista de la ingeniería.
El hombre y su psíquica debe proyectarse lo mismo que la hormiga, debe alimentar su pensamiento, y al mismo tiempo, construir principalmente su propio intelecto o sabiduría, para que pueda desarrollar su ingenio sobre una inteligencia psicológica que le permita el éxito, seguridad y unidad que le respaldan su ciencia.
"El hombre inteligente, no es el que habla sin argumentos, es más bien el que enseña y sostiene su expresión, en el conocimiento y la ciencia"
F P
No hay comentarios:
Publicar un comentario