La flor del cardosanto, es una flor muy común o popular, aquí en el nuevo mundo. Esta flor llama la atención a los naturalistas y biólogos de este jardín. Ya que esta flor, recibe solamente la luz del sol, y cuando es el atardecer, empieza a cerrarse y a ir impidiendo que los insectos la sigan visitando, antes de la puesta del sol.
Cuando la puesta del sol, se da, ya esta flor, está como el arca: herméticamente cerrada. La verdad es que me llamó la atención, este comportamiento, y quiero compartirlo con más personas que les gusta, la literatura sobre la biología.
Su flor está compuesta por unos tres o cuatro pétalos, es amarilla, pero parece que no le gusta la sombra ni la oscuridad. Y le huye al sereno de la noche.
Ella se auto protege, contra estas cosas del mundo de la oscuridad. Cuando el hombre entienda que debe hacer sus transacciones y negocios, meramente bajo la luz del día, entonces estará entendiendo el mensaje de la flor del cardosanto del nuevo mundo. Que es un arca natural en miniatura.
Aquí la aplicación, es que no debemos recibir el rocío de la vana Filosofía, ni tampoco dejar que la oscuridad, del género humano, entre en nosotros, y para ello, debemos cerrar los pétalos de la inteligencia, en un acto natural de supervivencia.
Esta flor tiene unas lecciones que suelen ser interesantes en el mundo de la literatura científica y literaria. Los insectos que llegan tarde, ya no encuentran su néctar disponible. Otros que llegan, exactamente a la puesta del sol, ya no encontrarán, su última comida.
Porque la flor de cardosanto, se ha cerrado como el arca de la inteligencia. No permite, ni se presta para la intemperancia, ni para promover la indisciplina de los insectos. El que lea, entienda.......
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