viernes, 26 de mayo de 2017

ACTOR Y PRODUCTOR

Muchos miles de años después de que el hombre, surge sobre la tierra, obedeciendo al llamado del Creador, empieza a percatarse de un mundo de especies que le eran totalmente desconocidas, y sus comportamientos desconcertantes, aunque no entendía la naturaleza, el cielo, la tierra y el mar; le costó muchos años o tal vez miles para entrar al mar con sus tecnologías, y darse cuenta en medio de esa tranquilidad del lecho marino que la comedia viene del gigante de las aguas, llamadas marinas, en nuestro mundo.

Es muy placentero, poder estar allí, y contarles la historia de dos artistas donde el uno, diríamos, que es el actor y el otro es el que filma esta comedia en el desierto de las profundidades marinas, todo a lo natural.

Mientras en la superficie, los peces y cardúmenes, entre las aguas marinas, vienen y van, los tiburones buscan algo para comer, y las ballenas se reúnen entre la lejanía de la inmensidad del mar.

El pulpo venenoso, es un cefalópodo que quiere seguir transmitiendo la cultura de su arte teatral.  El se transforma en varias formas como parte principal de sus cambios, que proyecta bajo un supuesto enemigo al que se le llama: la platija.

Este es un pez plano, no es muy fácil detectar sobre la superficie de la arena marina, ya que permanece camuflado en ella, y sus ojos no paran de filmar estas transformaciones que le presenta el pulpo venenoso, quien lo mantiene encantado, con ese mundo o cultura de la transformación.

Podemos pensar con esta escena que el mar tiene un teatro que es una de sus glorias o ciencias, más importantes, porque en estos dos seres encontramos la hipótesis de transformación, y en el otro que está detrás para filmar cada acontecimiento de la transformación marina, que la puede ver de diversas formas, y esto es interesante para las culturas cristianas.

Debido a que los animales son los que nos han dado, el creer en que el hombre, se transforma.  Pero realmente vemos que la transformación en el hombre, se logra gracias al conocimiento que pretenda desarrollar, viviendo en esa vida que le agrada y le satisface en cada momento de su diario vivir, y en ningún momento es una transformación como la que ve, por ejemplo, en el mar de la humanidad, el científico San Pedro.

Pedro, siguió a Jesús y en cada día contemplaban sus ojos, una escena diferente y había momentos en que se transformaba según dicen sus escritos. Pero en realidad, es el mismo suceso entre el pulpo venenoso y la platija.

En nuestro siglo 21 las cosas de la ciencia, no es que hayan cambiado realmente, es que no se habían estudiado.   Podemos decir que transformar el entendimiento, no es muy fácil, pero nos es posible gracias a la sabiduría de la tierra, en este caso del mar, quien nos presenta esta obra para hoy, y dos actores ocultos durante miles de años: el pulpo venenoso y la platija, que estudiaron teatro y producción desde antes que surgiera la cultura de Adán y Eva, en nuestro jardín global.

"Teatro y conocimiento, ofrece el mar a los estudiantes de la transformación"
F P

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