Las guerras han existido desde que el hombre existe en la tierra, es más podríamos decir que desde antes de que el hombre existiera, ya estaba la guerra implantada en el mundo natural.
La guerra no comienza con el hombre, y al estudiar la naturaleza o las ciencias, adoptó el hombre, la filosofía de la guerra y la paz, pero se inclinó más hacia la guerra.
La paz del hombre sobre la faz de la tierra, con su prójimo, ha sido por etapas. Unas han sido prolongadas, y otras han sido cortas.
Las personas enemigas de la paz, dicen que ésta no se logra, pero generalmente la paz, ha sido una ciencia que la estudian mucho en el mundo, pero la viven y la practican pocos en el cosmos.
Podemos decir que las Escrituras dicen que la paz la tendremos con los que quieran la paz, con los que no aman la desgracia para la familia, con aquellos que aman la sabiduría.
El hombre se ha dividido por las guerras en diferentes clanes humanos, así como la naturaleza se lo ha enseñado.
Por ejemplo, la hiena no tiene paz con el león, y así con muchas otras especies, ya que ella es muy sanguinaria. El león no deja en paz a los ñu, a las cebras y venados, entre otras especies.
Lo mismo le pasa al hombre que no tiene una cultura positiva y fundamentada en las ciencias, que no quiere el desarrollo y aborrece el conocimiento práctico.
Para uno ser antisocial, no se necesita tanto estudio, sólo se necesita ser una persona con muy pocas virtudes y tomar un arma para causar destrucción y dolor, no solamente a quienes lo rodean, sino a sí mismo.
Vemos el caso de Francia, donde los terroristas que están identificados, han sido capturados por el Gobierno para interrogarlos, teniendo en cuenta que en sus familias, han salido algunos hombres "amadores de sí mismos" llenos de odio, venganza y de represalias, contra el mismo hombre.
Pero todo el que toma espada, a espada debe morir, y no conocerá las virtudes que tiene la paz. El hombre necesita cultura, pero una cultura que tenga unos principios basados en el comportamiento de la tierra, no en la cultura o creencia de que Dios, respalda los crímenes de lesa humanidad que comete el hombre.
"El hombre sanguinario trata de gobernar al mundo, dice Jehová, más el hombre inteligente, se ocupa de las ciencias y la paz en el cosmos"
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