Los indígenas, de Nueva Guinea, se hacían muchas preguntas con respecto a la cultura del hombre blanco, y una entre las tantas preguntas que esta cultura aborigen, se hacía es que ellos nunca habían visto que el hombre blanco, trabajara como ellos.
Tal vez porque ellos se la pasaban trabajando en su medio, y construyendo en diversas formas. Mientras tanto se quedaban pensativos en que a sus vecinos, culturalmente, hablando, no se les veía espíritu de prosperidad, debido a que no trabajaban como esta cultura aborigen de nueva Guinea.
Pero ellos observaban que los blancos, se entregaban a misteriosas actividades para la psíquica de estos aborígenes, como la de sentarse ante una caja de metal provista de cuadrantes, escuchando extraños ruidos que salen de ella, y trazando signos en hojas blancas, lo cual para ellos, era algo así como ritos mágicos.
Pero esto sucede no solamente en Nueva Guinea, sino que este suceso es universal, debido a que cuando una cultura toma un rumbo, las demás empiezan a preguntarse, qué pasa con esa nación que está haciendo, cosas sin sentido.
Cuando se comienza con la idea de producir, las computadoras, por ejemplo, a realizar ensayos y gráficos en papel, muchas personas en el mundo, aún las ilustradas, criticaban o se preguntaban así como los aborígenes de Nueva Guinea, acerca de lo que estaban haciendo estos hombres que no trabajaban, y se la pasaban todo lo más estudiando e investigando.
Y parece que en la cultura tecnológica, en su mundo, se tenía que hablar mucho de la ingeniería, la matemática, y otras ciencias extrañas, al común de las culturas, donde se hacían críticas negativas, y persistían en que la humanidad, tendría graves problemas, debido a los inventos que aparentemente para los representantes de la cultura de Nueva Guinea, en el cosmos, era difícil de entender y que podría ser una amenaza para la humanidad.
Sin embargo, podemos ver y sentir que ese es el ser humano, que los estudiantes en las academias, y todos los estamentos de cultura, podemos analizar u observar que hay algunas personas estudiantes que se destacan en cada medio cultural, de una forma muy parecida a los blancos que no entienden los aborígenes de Nueva Guinea.
Porque resulta que estos estudiantes no necesitan tanto tiempo en el estudio, y son muy inteligentes, y aunque no se les ve esforzándose mucho, logran su objetivo académico, y quizás mucho más.
Sin embargo, las personas que le rodean en la academia, no se percatan de que los que están a su lado, se están transformando, debido a su disciplina, y sed de conocimiento; que muchos desconocen, y entonces los demás estudiantes, se hacen la misma pregunta de los aborígenes de Nueva Guinea en otra cultura, en otro lugar e incluso en la civilización.
Así sucede con el mundo que nos rodea, porque nos pregunta, acercándose a nosotros ¿usted por qué escribe en la calle? ¿usted por qué cree en la ciencia? ¿usted por qué cree que la tecnología, es importante? Preguntas como estas también, me las han hecho a mí y muchas más.
Sin embargo, sigo creyendo en una de las culturas más sabias y poderosas del mundo, que nos permite responder desde la Nueva Guinea del Nuevo Mundo, donde creemos que nuestros aborígenes, son pensantes, y en la unificación de nuestras ideas, que son el sonido de la caja pensante humana, que nos transporta a todas las civilizaciones de la tierra.
"El hombre inteligente, será investigativo, y la ciencia del aborigen, ilustrará su conocimiento compartido"
F P
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