Transcurrieron las fiestas de una manera muy tranquila para la familia, y los estamentos que estuvieron exponiendo su expresión folclórica y artística, que fueron la atracción, para el corazón de chicos y grandes, en este mundo donde el gozo y la alegría, promueven salud, a través del baile y la sociabilidad, que nos dejan ver el auténtico sentido de la zona cero.
Para este servidor, mi esposa Ilva Sarabia Sánchez, y su familia, fue algo muy interesante, por el tono de la atmósfera que respiramos y compartimos de una manera familiar, incluso con las personas que visitaron en estos días, la ciudad de los Hacaritamas, de las cuales nos sentimos altamente agradecidos, por su identificación cultural, familiar y recreacional.
Creemos que la paz hay que buscarla así como todas las cosas del mundo, y que el agente humano, hay que reconocerlo mediante la vivencia, dándole gracias al equipo que organiza estos eventos que nos dejan el gozo compartido, y expresado a través de la alegría y la danza, que se disfrutó en los días de carnaval en esta ciudad, donde los niños y adolescentes, también pudieron compartir su alegría, en inteligencia y juventud, incluso hasta con los adultos.
Las aves del parque amanecieron después de la fiesta, en un canto de despedida, pero parece que estaban haciendo un homenaje a Antón García de Bonilla, y a su vestido negro, para este amanecer que es similar al plumaje negro, que se colocan para esta ocasión en el cierre de las fiestas de esta cultura, donde Antón García de Bonilla, es la leyenda que sigue con nosotros, así como estas aves que están encargadas de promover el canto y su vestimenta a color, con las vestiduras que posee el autor de esta leyenda.
Las aves continúan cantando desde esta plaza principal, la 29 de mayo, y este servidor acude a esta cita con las aves, para poder transmitir el evento, dejando en claro que el comportamiento de las aves en este día, cuando cesa el bullicio por las calles de la ciudad, recuerdan la sombra de las familias que gritaban en medio de su alegría, que se ha ido, porque su huella de pintura y otros elementos, han sido borrados por quienes asean la ciudad.
La idea de crear la zona cero, fue del poeta, escritor y compositor Mario Javier Pacheco, quien promovió este sano esparcimiento, durante los días de carnavales, así como de otros colaboradores que hicieron posible esta realidad, que transmitimos desde el corazón de los Caro.
La alegría cuando se sabe expresar y controlar el impulso, es muy interesante para las culturas y las naciones; sin este principio, cualquier evento en la tierra, no va a funcionar como lo requiere la humanidad o la empresa y la organización que promueven eventos sociales, en todas las culturas del jardín.
El respeto y el cuidado con los niños, los adolescentes, así como con los hombres de experiencia, debe tenerse muy en cuenta entre las familias que participan en los eventos que enfatizan sociabilidad, arte y recreación.
De lo contrario, el deprimido verá que la necedad y el irrespeto por las familias y descendencia del jardín, lo llevarán al abismo de la soledad por la indisciplina.
Los invito a contemplar esta escena en el parque plaza 29 de mayo, a través de este enlace: https://youtu.be/ZGI_ONJisRw
"Disciplina, cultura y arte, lee el sabio en la sociabilidad, más al insensato, la crítica, lo destruirá"
F P C
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