El niño es un ser que espera desde que se concibe en el vientre de la madre, un mundo, donde la atención, el cuidado y el amor, sean la atmósfera que él comienza a disfrutar, en su tiempo de formación, principalmente, dentro del vientre que le da la vida, de esa madre, que responde por sus hechos.
Esto lo debe comprender toda mujer que se proyecta para concebir bajo la cultura de la planificación. Se necesita un elemento sobre todos, que es el amor, el que permite que dicho proyecto, sea una gran realidad.
Desde este punto de vista, la humanidad debe responder por sus propias obras. Igualmente como lo hace un escritor, cuando se proyecta crear una obra literaria, para compartirla con la familia literaria de nuestro jardín.
Pero en lo que concierne al cuidado y desarrollo del niño, está totalmente involucrado el hombre, y éste debe responder por este niño, que es sangre de su sangre, y carne de su carne
En caso tal de que no se pueda convivir con la pareja, hay que tener en cuenta que las relaciones humanas, no son fáciles de mantener en el orden y el equilibrio, en que se debiera.
La Psicología, ha estado durante millones de años, estudiando este caso para poder entender a la familia, que tiene cada día, un asunto por resolver, y muchas veces, las terapias, llevan a la pareja a abrirse, y entonces viene la necesidad de pensar en cómo brindarle al niño, las garantías necesarias, como las que se le ofrecen dentro del vientre, y que sean efectivas, para el desarrollo de su propia vida.
Al estudiar la Psicología, los comportamientos de las parejas, se adquiere un compromiso, cuando en este proyecto, alguno de los dos, decide retirarse. Entonces debe entender sin agravios, sin menosprecio con la pareja y seguir cumpliendo con su deber.
Esto es un principio de la Psicología, y las parejas, en este caso, que están comenzando, debieran asesorarse sobre este tema, que es la preparación para que el niño, tenga unas garantías, que la misma vida, no se las contradiga, porque la contradicción del ser humano, la mayoría de las veces, no es la del niño, es la de sus padres que sin pensar, sin responsabilidad, hacen el amor, y luego es que se piensa en qué es lo que ambos van a hacer.
Cuando esto sucede, ya está adelantado el proyecto, y viene una reacción que podemos decir que es negativa, y enseguida causa un impacto sobre la unidad. Sin embargo, el embrión no tiene idea de lo que pasa en la estructura humana, que cuando él empieza a comprender se percata de la violencia en el cielo del amor, sin planeación.
La socióloga y psicóloga Elena G. de White, nos dice lo siguiente, al respecto: "Dando una aplicación práctica a lo que han aprendido, crecerán constantemente en sabiduría y conocimiento" (La educación cristiana página 310, párrafo 2) Esta Psicóloga, nos da una definición en cuanto a la aplicación y el conocimiento práctico de la familia, muy contundente.
Los invito a visitar este video que se titula: Tratame bien - Terapia familiar, de una duración de: 6: 09, cuyo enlace es: https://www.youtube.com/watch?v=YpvchdP-Dqk
"Bienaventurado el que cree en la familia, y recibe el consejo de los sabios"
F P C
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