Cuando el emperador romano, Calígula, quiso anunciar públicamente su "divinidad", quiso ejecutar algunos actos con su "disfraz humano", como llamaba él su condición de mortal, realizando unos actos, como el que describimos a continuación.
El primero de tales actos consistió en ordenar a los jefes de puerto de toda Italia y Sicilia que detuvieran todos los barcos por encima de determinado tonelaje, depositaran sus cargas y los enviaran vacíos y escoltados, a la bahía de Nápoles.
Ninguno entendía el propósito de esa orden y suponían que él pensaba en una invasión a Bretaña, y que los barcos los usaría como transporte. Pero tal cosa no era así, ya que Trasilo uno de sus colaboradores, había profetizado acerca de él, que era tan imposible que llegase a ser emperador, como que pudiese atravesar a caballo la bahía de Baias.
Resulta que reunió 4.000 navíos, incluso 1.000 especialmente construidos para la ocasión, los ancló a través de la bahía, borda contra borda, en doble hilera desde los muelles de Puteoli, hasta su casa de campo de Bauli.
Las proas estaban hacia afuera y las popas entrelazadas. Las popas eran demasiado altas para sus fines, de modo que hizo que las redujeran de altura, aserrando el asiento del timonel y el mascarón, cosa que hizo que las tripulaciones se apenaran, porque el mascarón era la deidad guardiana del barco.
Luego cubrió de tablones la doble hilera y arrojó tierra sobre los tablones e hizo regar y apisonar la tierra. El resultado fue una firme y ancha carretera, uno cada mil pasos.
Hizo construir una hilera de tiendas a todo lo largo y ordenó que los jefes de barrio de Roma las aprovisionasen y las proveyeran de personal en el término de 10 días. Instaló un sistema de agua potable y plantó jardines. Convirtió las islas en aldeas.
Es de admirar esta obra de ingeniería de Calígula, ya que a pesar de su demencia, tenía algo de conocimiento de ingeniería para poder crear esas islas artificiales que realmente eran sorprendentes.
Podemos notar que el ser humano cuando sufre una alteración en sus sistemas de la mente, se convierte en un productor de novedades creativas que impactan a la colectividad, y que dejan huella en la historia, y que por su huella histórica, nosotros podemos seguirlo y cerciorarnos de sus acciones, que tuvieron gran connotación en su tiempo, y aún en este siglo 21.
"Sabiduría intermitente adquirió Calígula, aún en la inestabilidad de su cerebro. Dice Jehová"